Artículo publicado en el diario La Primera, escrito por Eduardo Gudynas, especialista de CLAES. La situación en toda la cuenca amazónica es grave, y los cambios que allí ocurren se están acelerando. Esta fue una de las advertencias que lanzó el panel internacional sobre ambiente y energía en la Amazonía, que acaba de sesionar en Lima.
Problemas como los proyectos de grandes represas hidroeléctricas o la ampliación de la explotación de Hidrocarburos, no son cuestiones restringidas a Perú, sino que se repiten en los ocho países amazónicos. Paralelamente, las políticas públicas no sólo no logran detener el deterioro ambiental, sino que en algunos casos lo agravan, apoyando emprendimientos extractivistas. De distintas maneras, se está acentuando el papel de los territorios amazónicos como proveedores de materias primas para los mercados globales.
Todo esto desemboca en una Amazonía cada vez más globalizada, que sigue los vaivenes del comercio y las inversiones internacionales. Pero es también una Amazonía donde se amplía la influencia Brasileña, en la medida que empresas y capitales de ese país se asientan en las naciones vecinas.
Este tipo de cuestiones fueron discutidas en Lima por este panel internacional, que es un grupo independiente de expertos convocados por Derecho, Ambiente y Recursos Naturales (DAR) y el Centro Latino Americano de Ecología Social (CLAES).
Frente a la gravedad de los problemas en marcha, una de las conclusiones del panel fue reclamar respuestas urgentes. Entre ellas, se considera que hasta tanto no se cuente con evaluaciones sociales y ambientales de mejor calidad, y estándares rigurosos, se hace necesario imponer una moratoria sobre la construcción de grandes represas hidroeléctricas y megaproyectos extractivos en la Amazonía.
¿Quiere decir esto que se prohíben todo tipo de aprovechamiento de la Naturaleza? Por supuesto que no. Lo que se deja en claro es que no puede continuarse con la actual ola de habilitación de enormes emprendimientos, que carecen de evaluaciones rigurosas y consultas participativas apropiadas, y que no sirven a las necesidades locales.
También se indicó la necesidad de considerar los límites ecológicos de apropiación de la Naturaleza amazónica. Esto obliga a abandonar el mito de la cuenca como reservorio de recursos casi infinitos, que podrían abastecer el consumo de todos los mercados, tanto los sudamericanos como los globales.
Estos y otros casos indican que las presiones sociales y ambientales en la cuenca son fenomenales. No hay tiempo para perder, y se hacen urgentes reacciones internacionales coordinadas para asegurar el futuro amazónico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario