lunes, 28 de enero de 2013

La condición global eco-eco


Artículo escrito por Eduardo Gudynas de CLAES y publicado en el diario La Primera. Pocos son los que advierten que, en la actualidad, los deseos y planes de los ministros de economía están cada vez más condicionados por factores ambientales, muchos de los cuales ocurren en apartados rincones del planeta.

En las últimas semanas, las lluvias que llegaron a algunas regiones de Rusia y Australia dieron alivio a la producción agrícola, con lo cual se esperan cosechas aceptables. Inmediatamente reaccionaron los centros globales de cotización de cereales, y sus decisiones arrastraron los precios de otros alimentos. De esa manera, la marcha del clima en el otro lado del planeta terminará afectando, por ejemplo, los precios de los alimentos en naciones como Perú. 

Más cerca, en Brasil, los planes gubernamentales de crecimiento económico están en riesgo por la caída en la disponibilidad de agua en muchas represas. Eso obliga que el gobierno de Dilma Rousseff deba encender centrales de generación térmica, muchas de ellas alimentadas por gas natural. El gobierno se ve así obligado a destinar grandes cifras de dinero para contar con una electricidad cada vez más cara, y por lo tanto se debilita su crecimiento económico. También redobla su interés en obtener energía barata desde las naciones vecinas, como pueden ser los planes de construir represas en la Amazonia peruana.

Nos encontramos frente a una estrecha asociación “eco-eco”, explicada por las vinculaciones de las condiciones ecológicas sobre el desempeño económico. La variabilidad climática, con episodios de sequías e inundaciones, que se alternan en los distintos rincones del mundo, tiene efectos económicos tan importantes como las decisiones que puedan tomar los ministros de economía en Pekín o Washington. 

Esta vinculación “eco-eco” no es sencilla de abordar para la economía clásica, y en particular cuando muchos países sufren la recesión. El economista Joseph Stiglitz recientemente alertaba sobre los “problemas que la crisis impide ver”, y sin dudarlo, dice que el más importante es el cambio climático. A su juicio, se deben reducir las emisiones de gases con efecto invernadero con medidas específicas, algo que no se está haciendo adecuadamente, y no debería asumirse que la recesión aliviaría este problema.

Así como la economía se encuentra muy interconecta a nivel global, todavía más estrechas son las vinculaciones ecológicas planetarias. Estos dos mundos no están separados, y la marcha del desarrollo está acotada por la salud ambiental. Dicho de otra manera, la economía peruana también depende de la ecología.

Ver en: http://www.diariolaprimeraperu.com/online/columnistas-y-colaboradores/la-condicion-global-eco-eco_129954.html

viernes, 25 de enero de 2013

Transiciones y alternativas al extractivismo en la región andina. Una mirada desde Bolivia, Ecuador y Perú

Esta publicación es el resultado de un proceso de diálogo entre expertos, líderes sociales e instituciones de la región y del análisis de los retos de la dinámica del extractivismo en los países andinos sobre perspectivas y enfoques para alternativas que puedan orientar nuestro camino hacia otros desarrollos y que permitan evitar o, por lo menos, amortiguar los impactos negativos de la dependencia y costos sociales y ambientales de la estrategia extractivista. 

El libro, editado por RedGE y CLAES, puede constituirse en un instrumento que contribuya con propuestas alternativas de políticas públicas para los próximos años, recogiendo experiencias de los países de la región. Escriben Eduardo Gudynas de CLAES, Roxana Azeña de LIDEMA, Joerg Elbers y Gabriela Muñoz de CEDA, y Carlos Monge de RWI.

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miércoles, 23 de enero de 2013

¿Otra vez Como sea? Camisea


Artículo escrito por César Gamboa de Derecho, Ambiente y Recursos Naturales (DAR) y publicado en el diario La Primera. Han pasado 10 años desde que el Perú se comprometió formalmente a proteger a los pueblos indígenas en aislamiento y en contacto inicial de la Reserva Territorial Nahua Kugapakori, un compromiso que condicionaba el proyecto de explotación de gas de Camisea (lote 88), pues la idea era intervenir en la Amazonia Peruana, reduciendo al mínimo los impactos sociales y ambientales en la zona, pues estaba muy presente –aún lo está-, la mala experiencia de contaminación del Rio Corrientes con los lotes 8 y 1 AB, que coincidentemente también son operados por Pluspetrol.

Han pasado 10 años y la creciente demanda energética del país está trayendo como consecuencia la presión sobre esta misma área. No es gratuito que operen el lote 56 (Camisea II de Pluspetrol), lote 57 (Repsol), lote 58 (Petrobras), el ducto original de TGP, el Loop Selva, el proyecto de ducto de Kuntur y el nuevo proyecto de Gasoducto del Sur. Pero aunado a la creciente demanda de energía que vive nuestro país, se encuentran dos factores mucho más poderosos que un crecimiento económico desordenado: primero, la falta de planificación energética que pareciera que el Estado Peruano apuesta por proyectos energéticos en la zona y en el país con un suspiro cada 6 meses; y la debilidad de la intervención estatal en reducir los impactos de sus decisiones políticas: en lo ambiental, en lo social, en lo político, en lo económico, hasta en la propia seguridad territorial.

Hace dos años, bajo la sombra de la irresponsable decisión de exportación del gas de Camisea (Peru LNG), decidió extraer más gas y transportarlo más rápido hacia los usuarios. Habría que preguntarse si estas dos decisiones han sido planificadas y cuanto se ha reducido del posible impacto negativo de dicha decisión. Quizás ni siquiera es necesario cuestionarse la legitimidad de esas decisiones –“El Perú avanza”-, pero lo cierto es que si queremos hacer las cosas bien y hacia futuro, debemos dejarnos de lado de las leguleyadas que sólo instrumentalizan derechos y generan desconfianza a largo plazo.

Un ejemplo de lo mencionado es la ampliación de la exploración del lote 88, fuera de este lote. El Estado ha dado permiso de buscar más gas a Pluspetrol, no solo dentro del lote 88, sino fuera de este, en la zona de amortiguamiento del Parque Nacional del Manu, así como dentro de la Reserva Territorial Nahua Kugapakori, incumpliendo el DS 028-2003-AG, que hasta ahora lo impedía (art. 3). ¿Qué dice la autoridad ad portas de aprobarse el EIA de ampliación de operaciones del lote 88? la Dirección General de Interculturalidad y Derechos de los Pueblos (DGIDP) del Viceministerio de Interculturalidad del Ministerio de Cultura dice: “los mecanismos de participación ciudadana son aplicables únicamente para la población en contacto inicial de los asentamientos Santa Rosa de Serjali, Montetoni y Marankeato, siempre que dicha población haya decidido y solicitado ejercer su derecho a la participación ciudadana (…) procurando un contacto mínimo”, permitiendo por primera vez un contacto formal fuera del área del contrato del lote 88 después de tantos años.

Ya no es necesario concesionar un lote Fitzcarrald, porque la leguleyada está hecha. La justificación a esto no tiene razón en una idea civilizatoria decimonónica, ni si quiera la fuerza del capitalismo, ni es razón el servilismo de la legalidad, sino simplemente seguir haciendo la cosas como sea. El Perú avanza, aunque en algunos temas no sabemos hacia donde…

Ver en: http://www.diariolaprimeraperu.com/online/columnistas-y-colaboradores/otra-vez-como-sea-camisea_129592.html

lunes, 14 de enero de 2013

Materias Primas: Para no Pagar el Pato


Artículo escrito por Armando Mendoza y publicado en el diario La Primera. A menudo se afirma que el avance de la globalización representa el triunfo del libre comercio internacional, del flujo irrestricto de bienes y servicios, sin barreras ni distorsiones. Ello puede resultar cierto en algunos casos, pero lo contrario también puede darse en otros. Tal es el caso de las materias primas, donde la mayor integración y articulación de los mercados internacionales va acompañada de una creciente pugna por el acceso y control de las mismas. En este proceso, los países productores frecuentemente terminamos siendo convidados de piedra, limitados a seguir los dictados de las grandes potencias.

La emergencia de nuevos poderes económicos como China, India o Brasil, hace aún más compleja esta pugna por las materias primas, particularmente de aquellas que como el petróleo son de carácter estratégico y no renovable. Así, por ejemplo, quien analice la política internacional china, vera una estrategia coherente en marcha, cuyo eje es el asegurarse el acceso a las materias primas. China es ya el primer demandante mundial de cobre, hierro, zinc y molibdeno, entre otros metales industriales. Pero además, es el segundo consumidor mundial de petróleo, y probablemente en pocos años se convertirá en el primero. Como consecuencia, las iniciativas del Estado Chino con otras naciones están articuladas al objetivo de garantizar el abastecimiento de sus industrias.

Ante esto, la prioridad para países ricos en recursos naturales; como el Perú; esta en desarrollar una política exterior coherente libre de idealismos y lirismos baratos, basada en el reconocido principio de que los países no tienen amigos, sólo intereses. Igualmente, debe abandonarse la visión, tan ingenua como peligrosa, de que la oferta y la demanda por materias primas se resuelven vía mercados abiertos y libres. Por el contrario, las manipulaciones son pan de cada día en estos mercados, marcados por la falta de trasparencia y gobernanza.

Somos una economía pequeña, con un desarrollo incipiente y rumbo no bien definido, pero que cuenta con abundancia de recursos naturales. El cómo y para que utilizar estos recursos debe ser tema central en la agenda nacional. El establecimiento de líneas claras para su explotación no puede estar ausente en ningún plan de desarrollo con visión estratégica. Asimismo, el Perú  debe articular alianzas con otros países productores en bloques regionales y globales que permitan defender nuestros intereses y asegurar alguna cobertura ante las fluctuaciones y distorsiones de los mercados internacionales. Así podremos asegurar que los beneficios de la explotación de nuestros recursos nos beneficien realmente. Si no, corremos el riesgo de terminar siendo; como tantas veces en nuestra historia; los que pagan el pato.

Ver en: http://www.diariolaprimeraperu.com/online/columnistas-y-colaboradores/materias-primas-para-no-pagar-el-pato_128882.html

viernes, 11 de enero de 2013

Nuevo jalón de orejas forestal


Artículo escrito por Alejandra Alayza, coordinadora ejecutiva de la RedGE y publicado en el diario La República. La demanda, a inicios de año, presentada por la Environmental Investigation Agency (EIA) que documentaba que entre el 2008 y 2010 el 37% de los embarques de caoba y cedro de Perú a EEUU incluyeron madera talada ilegalmente, puso más que nerviosas a las autoridades peruanas.

Esta denuncia ponía en evidencia que al menos 20 compañías estadounidenses importaron madera ilegal proveniente de la Amazonía peruana, violando expresamente estándares de protección de especies protegidas incluidas en el Anexo Forestal del TLC con ese país.

Luego de 8 meses de investigación, a inicios de diciembre, la Oficina de Comercio de los EEUU (USTR), confirmó los serios problemas y la denuncia del EIA. Si bien el gobierno norteamericano decidió no invocar los procedimientos que le permite el TLC, anunció un plan de acción bilateral de cinco pasos para atender los problemas de gobernanza forestal. Jalón de orejas forestal, que esta vez no debe quedarse en mera declaración de intenciones del gobierno.

Ver en: http://www.larepublica.pe/columnistas/globalizaciones/nuevo-jalon-de-orejas-forestal-27-12-2012

Los informes sobre conflictos


Artículo escrito por José de Echave de CooperAcción y publicado en el diario La Primera. El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) acaba de publicar un interesante informe sobre la protesta social en América Latina: una idea interesante del informe, que analiza la gran variedad de conflictos que se presentan en la región, es que las movilizaciones sociales en América Latina han sido y son portadoras de democracia.

En el Perú, la Oficina Nacional de Diálogo y Sostenibilidad de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), viene de estrenarse presentado su primer informe de conflictos sociales. De esta manera entra a competir con el trabajo que viene realizando, desde hace varios años, la Defensoría del Pueblo.

Para la oficina de la PCM, en la actualidad existen 66 conflictos en todo el territorio nacional, de los cuales 31 están vinculados a actividades mineras (formales e informales). Cabe señalar que la diferencia es notoria con las cifras que maneja la Defensoría que en su último informe da cuenta de 230 conflictos a nivel nacional. 

¿Cuál es la explicación? La metodología. Mientras que la Defensoría del Pueblo habla de conflictos latentes y activos, la oficina de la PCM no contabiliza los conflictos cuando éstos entran a una fase de diálogo. Tras la metodología también se pueden identificar marcos conceptuales distintos sobre cómo se define un conflicto. 

Al margen de los números y las diferentes metodologías, lo cierto es que no se puede negar que el 2012, ha sido uno de los años de mayor conflictividad social en el país y que éstos han sido cada vez más intensos, provocando crisis políticas y escenarios de gran polarización. 

No se trata de subestimar o sobredimensionar cifras, sino de entender las bases objetivas que explican los conflictos y buscar transformarlas, canalizándolos por vías institucionales y de diálogo democrático. Como lo señala el informe del PNUD, “desde una perspectiva analítica, la situación ideal es aquella donde existen, a la vez, conflictos sociales y capacidades institucionales y políticas para procesarlos”…“El conflicto no es sinónimo de guerra; es más bien el orden conflictivo de la interculturalidad y de la diversidad consustancial a la democracia. En ese sentido, la política se hace cargo de la elaboración de la pluralidad”. 

Aparentemente, eso es lo que está fallando desde hace un buen tiempo en el Perú. Se necesitan precisamente estrategias para abordar de otra manera los conflictos para que, como lo señala el informe del PNUD, el país avance y no retroceda en sus prácticas democráticas.

Ver en: http://www.diariolaprimeraperu.com/online/columnistas-y-colaboradores/los-informes-sobre-conflictos_128603.html

miércoles, 2 de enero de 2013

Desbalances globales y continentales 2012


Artículo escrito por Eduardo Gudynas de CLAES y publicado en el diario La Primera. Una mirada a los vaivenes mundiales durante el año, permite elaborar un esquemático balance. A pesar que repetidamente se anunció el fin del capitalismo por la crisis económico financiera en los países industrializados, nada de eso ha tenido lugar. Es más, esa crisis se está procesando como una etapa más del capitalismo convencional, con masivas transferencias de riquezas y aumento de la pobreza y desigualdad.

En esos reacomodos, muchos países de América Latina han logrado aumentar sus exportaciones y atraer más inversiones aprovechando los nichos disponibles en materias primas. Pero la bonanza de años anteriores se está apagando. 

El reciente informe del BID alerta que las exportaciones latinoamericanas solo crecieron 1,5% en el 2012, mientras que en el 2011 aumentaron un 26%. Algunos países aumentaron sus exportaciones, pero en otros hubo caídas, como en Perú (reducciones estimadas en 3-4 %). Los actuales desempeños se deben a una demanda europea en contracción, la desaceleración en Asia, y un pequeño repunte en las importaciones de EE.UU. 

Entretanto, el precio de las materias primas ha aminorado sus escaladas, aunque sus vaivenes en muchos casos dependen de los cambios en el cLima global.

China sigue avanzando en América Latina. Se enfoca en el suministro de minerales, Hidrocarburos y alimentos, pero también invierte en áreas conexas, como hidroeléctricas y puertos.

Queda en evidencia que la extroversión económica persiste, y el continente sigue globalizándose. Lo hace no solo comercialmente, sino también adhiriendo y defendiendo una institucionalidad global, como las reglas de arbitraje o los derechos de los inversores.

Es cierto que hay intentos de “desengancharse” de esa globalización. Por ejemplo, la utilización de una moneda “virtual” que reemplaza al dólar en el comercio regional (denominado SUCRE, y en uso por algunos países del ALBA) ya superó las 1,400 transacciones por unos 700 millones de dólares. Este es un paso alentador.

Otra alternativa a la dependencia global es apostar al comercio dentro de América Latina. Algunos lo han logrado: entre los países andinos, Bolivia y Ecuador registraron aumentos importantes en sus exportaciones regionales (34 y 23% según el BID), mientras que el peor desempeño fue Perú (8,6%). A pesar de esto, el comercio dentro de América Latina sigue siendo muy bajo (en el orden del 20%, mientras que en otras regiones es mayor al 50%).

Se cierra un año donde la globalización sigue muy presente, con todos sus claroscuros.


Extractivismo “sensato” a fin de año


Artículo escrito por César Gamboa de DAR y publicado en el diario La Primera. La semana pasada, el 19 de diciembre, el presidente Ollanta Humala promulgó la Ley del SENACE, el Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles. Este es un paso importante aunque en la ley hay ciertas falencias como la facultad de decidir del Consejo de Ministros cuando un EIA sería evaluado por el SENACE o los sectores. Fuera de ello, lo más interesante fue que el presidente Humala en sus declaraciones, afirmaba que “la maximización de utilidades no es el norte de las actividades extractivas en el Perú, no necesitamos ser el primer productor en determinado mineral si conlleva a una destrucción suicida de nuestro medio ambiente. Necesitamos buscar un equilibrio”.

Escuchar lo que mencionó el presidente Humala podría significar quizás que tanto su primer gobierno (2011) como el actual (2012) no estuvieron tan alejados en objetivos, y su distancia se debe más a posicionamientos políticos, a estrategias, distintas elites que no pueden converger en consensos con el sector privado y la tecnocracia pública. Finalmente, proponer un extractivismo sensato, que permita seleccionar los proyectos de inversión, y reduzca sus impactos, posiblemente desacelerando la economía pero generando bienestar común es una opción política para el próximo año. 

¿Es cierto lo que afirmamos? Nos queda claro que desde la sociedad civil existen intereses políticos, como los hay en el sector privado, y en los propios funcionarios estatales, pero si tuviéramos que simplificar los mismos, nos encontraríamos entre los que avizoran el cambio del sistema capitalista internacional, es decir, cambio al modelo de desarrollo actual, especialmente con propuestas o soluciones regionales que aún suenan muy utópicas. Mientras que por el otro lado tenemos la posición que no debemos cambiar el sistema, sino mejorarlo, reducir sus errores, potencializar sus aciertos, bajo una estrategia de baja intensidad, sumando un poco a poco lo que dure todos los años del gobierno actual.

Entonces, para el 2013 tenemos varios retos. Un primer reto es mantener a los que pretenden el cambio, que se encuentren alertas ante cualquier intención de vulnerar el medio ambiente y los derechos de la población local. Por otro lado, un segundo reto es apoyar a los que pretenden mejorar el sistema desde adentro. Lo difícil será mantener la perspectiva de sostenibilidad, una visión estratégica y una conducta coherente que permita consensos a largo plazo. Esperemos que el sector privado entienda la oportunidad y el mensaje de una apuesta de mejora a largo plazo y dejar el negocio rápido y caro, y deje de presionar.